Avanzan los diálogos de paz con las disidencias
Los diálogos con las disidencias han avanzado con la conclusión del tercer ciclo, centrado en superar desafíos como la extensión del cese el fuego bilateral acordado en octubre, el cual expiraba el 15 de enero. El Gobierno y el Estado Mayor Central (EMC), la principal disidencia de las Farc, cerraron este capítulo con la firma de un acuerdo que aborda compromisos en participación social, asuntos socioambientales y transformación territorial. Se anunció una cuarta ronda para marzo.
Camilo González Posso, el jefe negociador del Gobierno, compartió los logros y perspectivas, en las que destacó que el ciclo concluyó con «resultados positivos», incluyendo la recepción de un informe crucial del mecanismo de verificación. Este informe ha permitido trazar una ruta para prevenir nuevos incidentes y establecer 22 mecanismos locales para supervisar y proteger a la población.
González Posso subrayó la importancia de los acuerdos humanitarios, especialmente la declaración sobre la no vinculación de niños y niñas, así como la desvinculación de quienes ya están en filas. Este aspecto sensible aborda el temor de las familias ante el reclutamiento de sus hijos por grupos armados, una problemática arraigada en la historia trágica de Colombia.
En relación a la agenda, se acordaron temas clave como tierras, territorio, ambiente, seguridad, educación, despojo, desarrollo sostenible, poder local, modelos de gobernanza, víctimas del conflicto social y armado, economías ilícitas, territorialidades étnicas y campesinas, así como garantías para las partes durante y después del acuerdo. Además, se incorporó de manera significativa el tema ambiental, abordando la problemática amazónica y buscando reducir las afectaciones ambientales asociadas con conflictos sociales, ambientales y armados.