Nuevo Atentado Terrorista Contra Oleoducto Caño Limón en Cubará, Boyacá
En la madrugada de hoy, un nuevo atentado terrorista afectó al oleoducto Caño Limón-Coveñas, en la jurisdicción de Cubará, Boyacá. Según la información preliminar, el ataque fue perpetrado por hombres pertenecientes a la Comisión Ernesto Che Guevara, un frente del Ejército de Liberación Nacional (ELN).
El atentado provocó una explosión que causó daños significativos en la infraestructura del oleoducto, generando un derrame de crudo en la zona. Las autoridades locales y los equipos de emergencia fueron movilizados inmediatamente para controlar la situación y evitar mayores impactos ambientales en la región, que es conocida por su biodiversidad y por estar cerca de comunidades indígenas U’wa, quienes también se ven afectadas por estos ataques recurrentes.
Ecopetrol, la empresa estatal encargada de la operación del oleoducto, activó sus protocolos de seguridad y suspendió temporalmente las operaciones en el tramo afectado. Asimismo, se está evaluando el alcance del daño y el tiempo necesario para restablecer el funcionamiento normal del oleoducto, que es una de las principales arterias del transporte de petróleo en el país.
El Gobierno Nacional condenó enérgicamente el atentado, señalando que este tipo de acciones terroristas no solo ponen en riesgo la vida de las personas y el medio ambiente, sino que también afectan gravemente la economía nacional. Se ha ordenado una investigación exhaustiva para dar con los responsables y llevarlos ante la justicia.
El ELN, que sigue activo en varias regiones de Colombia, ha intensificado sus acciones armadas en las últimas semanas, a pesar de los intentos del Gobierno por retomar las negociaciones de paz. Este ataque, uno de varios que ha sufrido el oleoducto en lo que va del año, subraya la persistencia del conflicto armado en algunas zonas del país y los desafíos que enfrenta el Estado en la protección de la infraestructura crítica.
Las autoridades locales y nacionales han pedido a la población mantenerse alerta y colaborar con las fuerzas de seguridad en la identificación de cualquier actividad sospechosa que pueda estar relacionada con estos grupos insurgentes.